Este blog nació con una pérdida y ha ganado infinito...

lunes, 27 de abril de 2020

El valor de lo imperfecto. Kintsugi.



El kintsugi es una poderosa metáfora de la experiencia humana.
Somos el resumen de nuestras experiencias y estás experiencias son las que nos permiten crecer.

Cometer errores es ser humano, sufrir daño es ser humano,lucir nuestras cicatrices con orgullo, es celebrar a la persona que hemos llegado a ser a lo largo de un viaje que se llenará de alegría y de tristeza. La una no puede apreciarse sin la otra.
Aquellos que tienen cicatrices y son conscientes del valor que tienen,se vuelven más poderosos gracias a ellas.
Este arte japonés nos recuerda que no es malo tener cicatrices, que es bello y nos hace humanos.

Y esto me conecta con una de las premisas de la Disciplina Positiva; ver el Error como una oportunidad de aprendizaje.
Darnos cuenta de nuestra propia humanidad y de que cuando tratamos de cambiar viejas herramientas, el miedo al vacío que deja ese hueco, al no saber que otra herramienta emplear, a veces, nos hace retroceder y volver a usar las antiguas .Es como cuando los niños aprenden a caminar, al principio van sujetos a todos los sitios y desde esa seguridad van hacía adelante, pero para seguir en su camino y descubrir nuevos espacios, ha de soltarse y ese proceso conlleva caídas. Los niños, se caen y se levantan y siguen...Loa adultos, a falta de curiosidad y llenos de miedos, tememos soltar lo conocido o creemos desde nuestro ser soberbio, que con leer o hacer un par de cursos, ésta todo aprendido. Y no, hace falta practicar y practicar, caerse varias veces y levantarse de nuevo, el proceso no es lineal, porque somos humanos y la vida es cíclica, por lo cuál, puede que en determinados momentos, nos veamos a nosotras mismas repitiendo patrones que creímos olvidados y es justo, en esos momentos, donde la mirada compasiva, nos ayudará a rellenar de oro nuestras grietas, como hacen con las piezas de cerámica.

viernes, 10 de abril de 2020

Dibujos de Carlota 4 años


La leyenda de la foto sería, como ella escribe por detrás: Toda la Familia! Ésta frase te define muy bien pequeña....eres un bombón relleno de amor, te encanta estar y pasar tiempo en familia y así nos lo haces saber. Es un honor enorme ser tu madre. Te quiero pequeña.





miércoles, 1 de abril de 2020

El tren de las caricias (covid 19)



Diseño de Joel y Carlota
Este tren tiene una sola parada, en casa, sin embargo puede viajar lejos, de corazón a corazón, de cada uno de los miembros de la familia.

En estos días, el estrés y la tensión se ha ido acumulando en nuestro cuerpo, la falta de aire, de ejercicio físico, el exceso de teletrabajo, teledeberes, y la sobreexposición a las pantallas, hace que nuestro cuerpo se tensé , las emociones no expresadas se fijan el cuerpo, y de igual forma, en que las emociones pueden ser expresadas y validadas mediante palabras y gestos amables, el cuerpo puede ser acompañado y validado por las manos, las caricias, los abrazos....Acariciar es viajar con las manos al corazón del otro.

Os propongo un ejercicio para hacer en familia, se llama el Tren de las caricias o los masajes:

Consiste en colocarse uno tras otro formando un tren, de tal manera que todos tenemos la espalda de la otra persona para darle nuestras caricias o nuestro masaje.
Después giramos en la otra dirección para que la persona que estaba en cabeza, pueda experimentar la sensación de dar el masaje y al que estaba en la cola, pueda recibirlo.

Beneficios de éste ejercicio:

  • Momento de conexión afectiva con la familia.
  • Si, lo realizas antes de ir a dormir, como el tren cuya parada próxima es la cama(sobretodo a la hora de acompañar a niñ@s pequeñ@s), ayuda a bajar la activación, favorece la relajación, por lo que será más fácil que concilien el sueño antes.
  • Disminuye la presencia de Cortisol, hormona que se libera ante el estrés.
  • Favorece la liberación de Oxitocina(conocida como la hormona del amor), que induce a la relajación y nos hace sentirnos plenos y felices.
  • Hay estudios* que revelan que acariciar mejora la función pulmonar, la función inmune y mejora la salud de nuestro corazón.
  • La caricia es un acto de amor y de reconocimiento.



*Universidad Research Institute de Miami