Este blog nació con una pérdida y ha ganado infinito...

lunes, 27 de mayo de 2019

Reflexionando sobre los enfados...

Mamá y vosotros, ¿porque no os enfadáis??

Ésto me lo pregunta mi peque de 3 años mirándonos a su padre y a mi,  después de que yo me enfadase con ella y con su hermano de 6 años, por no querer colaborar.

Ahora, visto desde lejos, me doy cuenta que detrás de esos enfados, hay un "tomármelo como personal", un juicio y como todo juicio, después una sentencia "no tengo autoridad, me toman el pelo, no les importo"...
También veo, que esto no es cierto, es solo el miedo el que habla y la necesidad urgente de resolver una situación a mi manera, obviamente, sin verlos a ellos...que ya estaba cansados o que no tiene adquiridos esos hábitos.

Yo le respondí: Si, nos enfadamos papa y yo, pero no nos gritamos ni nos tiramos cosas, hablamos y tratamos de entendernos y llegar a acuerdos.

Ah, Qué fácil!!!...y porque no hago esto con mis hijos?? Cuál es la diferencia?? Creer que por ser pequeños no podrán? Creer que soy yo, madre omnipotente, quién tiene que  saber que, como y cuando?

Pues sí, esa es la diferencia, colocarme en una posición de desigualdad frente a ellos, si, yo soy la grande, de la que dependen y sabe, un poco más que ellos. Pero , y el respeto? Acaso no merecen ellos, el mismo respeto que mi pareja?

Acaso, dándose cuenta del detalle de que papa y yo no peleamos, está poniendo de manifiesto, que hay otra forma de hacerlo.
O acaso, es que el problema son ellos y por eso, mamá se enfada??? Esto último, no quisiera pensar que es así....pero a veces, pasa, la lealtad filial hacia los padres es grande y si, mamá es buena para mi y yo la necesito y la hago enfadar, entonces el problema es mio.( sus pequeñas cabecitas, piensan rápido)

No, el problema es la falta de autorregulación de mamá, en primer lugar lugar, que salta o se dispara y por consiguiente, acciona vuestras neuronas espejo, saltando o disparándoos o negandoos(parte de vuestra integridad, va en ese No)

Aquí sigo, revisando y agradeciendo a mis dos pequeños maestros, pues es gracias a ellos que se produce ese temblor en los cimientos de mis certezas, para dejar paso a las dudad y a crear nuevos patrones.
Como dice la Gestalt: " La cabeza en el cielo, los pies en el suelo y el corazón en el aquí y ahora"

Sois mi ahora, os quiero peques...sois grandes!!


martes, 7 de mayo de 2019

Reflexionando sobre el autocuidado

El otro día me fui de viaje, sola, sin niños...necesitaba desconectar y respirar y a la vez darme cuenta que soy capaz de hacer aquello que me reta y me da miedo. Volar, viajar sola, dejar a los míos(aquí se añade algo de culpa y como siempre toca revisar, la etiqueta de Madre y su significado).
Siempre que hablamos de auto cuidado, lo interpretamos como hacer algo que te guste, parar, respirar, hacer una pausa, conectar contigo, comer bien, dormir, hacer ejercicio...etc...
De alguna manera en el auto cuidado también tenemos que estar haciendo cosas, para cuidarnos...

Y yo, este fin de semana, lo único que quería era Ser, conectar otra vez con esa parte de mi, que se ha ido al fondo al convertirme en madre.

Al volver a casa, con mucha alegría por el tiempo vivido y compartido con mi amiga y conmigo misma...yo pensaba que era suficiente para estar sin que saltasen esos resortes automáticos, esos botones que apretamos cuando estamos con nuestros hijos y hacen que veamos esa parte que menos nos gusta, la que grita, la que se impacienta, la que guarda silencio enfadada....

Pero NO, y esto, si ha sido un choque mental....pero si me he ido y he desconectado, he hecho una pausa, salido con amigos, superado miedos...¿qué pasa? ¿qué pasa que me pongo nerviosa cuando el tiempo apremia y no llegamos, cuando vuestro ritmo y el mio vuelve a chocar?
Pues pasa eso...que chocan nuestros ritmos, que a los niños, les cuenta llevar el ritmo vertiginoso y rápido del adulto, ellos se cuecen a fuego lento, necesitan tiempo porque ellos son Esencia pura, ellos simplemente SON y nosotros, los adultos, les pedimos que Hagan todo el tiempo y encima, que hagan aquello que nos conviene a nosotros que vamos detrás de la vida corriendo.

De nuevo, me he dado cuenta, de la importancia del auto cuidado, pero no solo en la pausa, sino en el auto descubrimiento de uno mismo y nuestros propios resortes, de aquello que yo no tengo aprendido y que necesito aprender y/desaprender para poder ajustar nuestros ritmos.
 Es importante que como padres aprendamos herramientas para acercarnos a los niños y que estos se sientan tenidos en cuenta e importantes, pues de esa manera querrán colaborar y estarán más receptivos.
En Disciplina positiva, hay una frase que me encanta: Primero Conexión y luego Corrección, pero no solo con el niño...conecta contigo, con tu nin@ interior, que necesita, que le faltó, como es y luego desde ahí enséñale, enseñate aquello que no sabes para poder dárselo luego a tus hijos.

Conecta de nuevo con la necesidad de poner en práctica aquellos conceptos teóricos aprendidos y aquellas herramientas de DP, que parecen fáciles en la teoría, pero que , al igual que la vida, necesitan tiempo y práctica para integrarlos.