Amor y miedo en tiempos de Covid 19.

Amor y miedo en tiempos de crisis.
Éste es el quid de la cuestión, ambas fuerzas se movilizan en nosotros en estos tiempos, por un lado aparece el miedo y tratamos de apartarlo de delante a manotadas y haciendo cosas que sobrecargan nuestras despensas, llenando no solo nuestras neveras sino también nuestro tiempo con mil y una recomendaciones sobre que hacer, que yo creo que nos va a faltar cuarentena para poder hacerlas todas.

Tenemos por delante una carrera de fondo, donde vamos a necesitar una contención real a nuestras"ansias" emocionales, a nuestro miedo a la pérdida del otro, a nuestro miedo a la pérdida del vínculo...

De ésto modo, si nos ponemos a ojos de niño, podemos ver cómo ese perseguirnos incansablemente por la casa, ese llamarnos 2 minutos después de habernos ido de la habitación, persigue ese mismo fin, cubrir ese sentimiento de pertenencia, esa necesidad de sobrevivir emocionalmente en un mundo en el cuál yo dependo del otro y en el caso de los niños es así al 100%.

Es tiempo de parar, de mirar con ojos que ven, de ver aquello que tenemos delante, incluso aquello que no hemos querido ver y que ahora se nos para enfrente, para tomar decisiones y elegir como responder. Tiempo para poner el Foco en lo que sí tenemos, en ese tiempo que antes, se nos escapaba líquido entre los dedos y ahora parece un losa. Tiempo para estar, para darnos y dar nuestra presencia a los nuestros. Tiempo para Ser aquello que soy.

Por otro lado aparece el Amor, amor que nos permite contactar con el sentimiento de confianza, con ser optimista  querer llegar al otro y compartirme en mi alegría.
En estos tiempos de "obligado" aislamiento , para poder hacer una contención real al contagio del virus, está surgiendo la iniciativa ciudadana de salir al balcón a aplaudir, una iniciativa que pone de manifiesto ese Sentimiento de comunidad del que tanto habla la Disciplina Positiva, y éste es la lado positivo, la parte solidaria del ser humano, al cuál, si le das la oportunidad de aportar y contribuir, va a hacerlo.
Otra iniciativa que está surgiendo es la de escribir cartas a aquellas personas que están en el hospital, aisladas y asustadas, pues por protocolo, los médicos solo pueden pasar una vez al día. Cartas que les harán llegar para que se sientan acompañados y arropados por la comunidad.
Os invito a hacerlas, supone un pequeña reflexión, Quién soy yo y qué puedo aportar? ésto nos ayuda a darnos cuenta de que podemos contribuir y que nuestra parcela de poder tiene una trascendencia.

cartas.venceremos.covid19@gmail.com

En chino, la palabra Crisis, se traduce por Oportunidad, no en vano, ésta distinción, puede ayudarnos a poner el foco en el miedo o en el amor.

Semillas emocionales

"Cada cosa que ocurre en tu vida tiene su origen en una semilla que tú sembraste.
¿Qué semilla quieres sembrar hoy?
Cuando llegamos a esta vida recibimos distintas semillas.
La semilla de la bondad, de la ira, las del amor, la comprensión, la duda y la confusión.
Según cuáles sembremos en la tierra de esta vida, así serán los árboles que veremos en nuestro jardín. Algunos tendrán hermosas flores y otros una savia pegajosa y desagradable.
Todos nacen de pequeñas semillas, pero al brotar y crecer van manifestando sus características particulares.Algunas de ellas nos gustarán y otras no.
Tú decides qué semillas plantar y cultivar en tu vida." Prem Rawat

Y así es con las emociones y los niños, nacen con ellas como pequeñas semillas a desarrollar y somos los adultos los que al comienzo de su vida, las abonamos, las regamos, les dejamos recibir el calor del sol o todo lo contrario. Seguramente, en función de cómo sean mis propias semillas emocionales podré acompañar mejor o peor las semillas de mis hijos.

De nuevo, y como cada cosa en la vida, tomar consciencia de quién y cómo soy, me va a permitir tomar decisiones más amplias y con mayor rango de acción.

¿¿Qué semillas has abonado en tu vida?? ¿Quieres plantar nuevas? Estamos a tiempo, el ser humano, se desarrolla humano haciéndose, practicando y cultivándose.